KIDMAN LA PODEROSA

La actriz australiana, Nicole Kidman, por fin rompió el silencio sobre su relación con «el eterno adolescente» Tom Cruise, con quien duró una década dentro del sagrado sacramento del matrimonio. Para la oscarizada, fue «una suerte» estar casada con el actor que hace de Ethan Hunt en la saga de Misión Imposible porque, a pesar de los altibajos que ha tenido durante su carrera, el enlace con Cruise «la salvó» de lo que otras actrices tuvieron que vivir en la industria, y eso es en torno a todo el escándalo de acoso en la industria que se traduce en el #MeToo. Dijo en una entrevista que recogió Vanity Fair que se casó muy joven -a los 22 años- y lo que buscaba «no era poder, sino protección»,

«Me casé por amor, pero estar casada con un hombre extremadamente poderoso me mantuvo alejada de la posibilidad de ser acosada sexualmente. Trabajé, pero todavía estaba muy metida en la crisálida. Así que cuando salí a los 32, 33, es casi como que tuve que madurar», vaya respuesta que se lanzó. De igual forma confesó haber vivido sus momentos #MeToo desde muy pequeña pero dijo que ella no los expone en un artículo sino que lo expresa a través de su trabajo.